ADVERTENCIA: A nadie le va a importar una mierda esta entrada, es de un mínimo interés literario. Tampoco os entretendrá, ni os enseñará nada nuevo, así que estáis a tiempo de buscar una buena página porno y dar rienda suelta a vuestra pasión.
Soy un impaciente, soy un egoísta, soy un depravado, soy un ególatra, soy un cínico, soy un engreído y poseo otras muchas virtudes moralmente cuestionables.
Soy un arsenal ambulante, venía armado con un kit básico al nacer, pero la fatalidad y la constante sucesión de calamidades y desdichas que ha sido este camino, que no se si seguí por elección propia o por pura inercia, ha hecho que desarrollara al máximo una gran cantidad de aptitudes y actitudes que permiten mi supervivencia, incluso cuando hay que elegir, vosotros o yo.
Se podría pensar que con semejantes cualidades no debería preocuparme nada, y en teoría así ha sido siempre, todo ha sido fugaz, da vértigo solo de pensarlo. Sólo cuando no espero nada, consigo todo lo que desearía si es que deseara algo alguna vez.
Y ahora deseo algo, lo deseo con todas mis fuerzas, porque para el tiempo, contra todo pronóstico, contradiciendo las leyes universales, ella para el tiempo. Anula mi visión túnel, esa visión que solo he llevado activada por conveniencia, por supervivencia. Ella echa el freno, desgarra mi ropa, abre mi pecho con sus manos y registra, y revuelve todo, busca entre toda la basura, entre toda la humedad, entre toda la oscuridad, y cuando localiza mi agonizante corazón, lo pone a latir a base de golpes, sin tregua.
La otra cara de la moneda es que me deja indefenso ante un mundo nuevo de rincones desconocidos para mi, no se cómo enfrentar algo así, porque todo es nuevo y desconocido, y yo solo tiemblo en la oscuridad, porque después de todo, al final y después de toda esta auto destrucción envuelta en elegante trama intelectual-artística, solo soy un cobarde.
Y vosotros tembláis ante la adversidad, tembláis ante lo desagradable, pero ese es mi hogar, eso es lo que ya solo espero, porque he comprobado que antes o después llega y me destroza, siempre llega, antes o después, y ahora, después de todo lo pasado, ahora eso me preocupa.
Me preocupa tanto que no me deja disfrutar del presente, del milagro de poder compartir un solo segundo con ella. Me preocupa porque estoy en guardia, estoy preparado, preparando mi mente para todo lo que pueda salir mal, para que no me coja por sorpresa y me destroce, porque no se puede destrozar lo que ya está roto.
A veces consigo olvidarme, y simplemente me pierdo en ella, porque no tiene sentido sufrir por lo que todavía no ha sucedido, pero me conozco, conozco mi vida, y de alguna manera u otra, voy a acabar jodiendolo todo, como por ejemplo adoptando este tipo de pensamiento, porque yo no soy esto. Yo soy brevedad, puro nervio, puro morbo, puro descaro, y ahora, sin embargo estoy tan preocupado, me importa tanto, me parece tan perfecta, me ha dejado sin aliento, deslumbrado, y ahora me encuentro midiendo al milímetro las posibilidades, como jugando una especie de quiniela o porra, sopesando, qué puede pasar, por donde puede venir el error, mio o suyo.
Lo siento por esta mierda de entrada que solo me sirve a modo de desahogo para un día tan terrible como el día de hoy, donde de nuevo se pone de manifiesto el desastre: hospitales, duda, cansancio, incertidumbre.
Y por si sirve de algo, soy un desequilibrado impaciente, egoísta, depravado, ególatra, cínico, engreído, y seguramente mañana ni me acuerde de esta rayada, porque cada día es un nuevo día, y la promesa de que te quedarás, de que me quedaré, de que tendremos algo solo de los dos...aunque sea un día más.
Y por si sirve de algo (y creo que es la primera vez que estas palabras salpican el papel digital de este blog), Te quiero. Y seguramente lo seguiré haciendo aún cuando tu pienses que la he cagado y te joda completamente la vida. Estas palabras quedan dicha, sellando y confirmando todo lo explicado en anteriores entradas que tratan este asunto.
Y algo más, no somos agujeros negros, al menos yo no llevo uno tras el pecho, y no podemos contener todo esto siempre, y a veces agota, y otras veces tiene su punto, resulta excitante, pero cuando el tiempo es tan breve y las posibilidades tan limitadas, cuando un niño juega con plutonio, es de esperar que en algún momento, por alguna parte, estalle todo. Y va a ser una explosión más que justificada y esperada, porque cuando lo lógico es vivir con normalidad y fingir solo una pequeña parte del tiempo, llevarlo de la manera contraria puede tener resultados imprevisibles, vives en la ausencia, y luego, cuando por fin llega el momento, finges que no te importa una mierda lo que está pasando, que no deseas con todas tus fuerzas arrancarle un mordisco, probar sus labios, rozar su piel, tan eléctrica, tan excitante.
En fin, creo que necesito dormir, así que de alguna manera, aquí dejo la entrada menos interesante de la historia de este blog, al menos para todos vosotros, ero entendedlo, mis niveles de energía están al mínimo, y deseaba decir esto, exponerlo tal y como lo veo ahora, como no me atrevo o no me dejan las circunstancias hacerlo, cuando tenemos la ocasión de cruzarnos en la brevedad.
Buenas noches.
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